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palabras bajo el peso de la gravedad

Back in town (de vuelta en casa)

Ayer llegué a casa. Los días en Marbella/Málaga han pasado raudos pero han sido intensos. De los conciertos me gustaría hablar con tranquilidad, sólo decir que me quedo con The Diviney Comedy y Mercury Rev, un 9 para ambos. Marbella me ha soprendido, no era lo que esperaba y lo ha hecho en positivo. Me hubiese gustado escribir desde allí, utilizando el flamante portátil, pero donde dormía no había posibilidad de conexión a la red. Mejor, desconexión total. Ya os cuento.

Un paso adelante

Por fin en movimiento. No os lo he dicho, pero finalmente me decidí por el portátil que creo más me convenía y curiosamente el primero que me llamó la atención. Me costó mucho tomar la decisión, probablemente porque ya la había tomado previamente, pero, en una noche extraña, un par de cervezas me ayudaron a hacerlo. Por ello, bajo mis dedos, se recalienta, joder que verano que nos ha caído, un Sony VAIO VGN-SZ2VP/X.

Ninguna de las muchas máquinas que revisé, y os prometo que fueron muchas, se le acercaba en el binomio prestaciones/peso. Y como ya os decía, este último era un factor determininante.

Las primeras sensaciones son excelentes, aunque tampoco debían ser diferentes por el precio que he pagado por él. Un bonito capricho que me va a permitir, por ejemplo, escribir esta entrada desde el salón de mi casa. Esta noche probaremos desde el amable camastro.

Un chino más en el bolsillo

Hoy es mi cumple. Y lo digo así recortado, con soniqute aniñado, como para sentirme más joven. Pero no es el caso. No me importa mucho envejecer, bonita palabra, salvo por las cosas que me voy perdiendo, por lo que me gustaría haber hecho y no hice.

La verdad es que ni me hubiese enterado de que era hoy si no llega a ser porque mi madre se encargó de recordarmelo muy temprano. Cómo para intentar pasar desapercibido. Siempre hay quién te quiere bien y te lo recuerda.

Algún día planearé una buena fiesta de cumpleaños, con una banda de rock tocando en vivo y lo que se encarte. Eso es lo que más me recuerda a una fiesta de cumpleaños. Lo intenté en el pasado pero siempre acabó todo en verdadero desastre. Es decir, aún ansio una fiesta de cumpleaños perfecta. Y seguramente volveré a intentarlo. Pero no va a ser este año.
Hoy ha sido un día normal, he trabajado como cualquier otro, y lo único que voy a hacer, en unos minutos, es salir a cenar a un buen restaurante con un par de buenos amigos. Brindaré por vosotros.
Hasta pronto,

Er Masca.

Nos vamos a Málaga

Totalmente inesperado pero he comprado entradas para el Terral en Málaga. He pillado entradas para el «Terral Noche» (miércoles 19: Belle & Sebastian, Mercury Rev, Christina Rosenvinge), para el viernes 20, Erikah Badu, no conseguía acordarme donde iba la h, y sobre todo no podía perder a los Divine Comedy, el sábado 22, los tres conciertos que cierran el ciclo. Es decir, un fin de semana muy largo en la Costa del Sol.

En principio, no es de mis sitios preferidos, menos en verano, pero nos dejaremos llevar por eso de que no hay mal destino, sino viajero despistado y mal informado. Quería haber visitado el Museo Picasso desde hace tiempo y también conocer Málaga, «tan cerca, tan lejos». Seguramente dormiremos en Marbella, por razones de intendencia, pero Málaga será donde pasemos la mayoría del día. Supongo. A ver si tengo tiempo para preparar un poco el viaje.

Parchea… que algo queda

He tenido la brillante idea esta noche de viernes de encender la computadora para entretenerme un rato. Mañana trabajo y no es cuestión de callejear y trasnochar a pesar de que las noches de poniente invitan a ello, amo esa sensación de calor que se mezcla con los escalofríos cuando te sorprende el viento al cruzar la esquina, la piel tersa de verano luciendo su mejor estilo gallina. Y es que tenemos un verano ventoso. Todo empezó con el Levante y ahora estamos de Poniente.
Bien, ocio. Eso pretendía. Primero me fui a echar un vistazo en joomla.org pues habíamos metido mucha información en la base de datos del proyecto suraventura.es y no teníamos aún copia de seguridad. Y a eso iba, a aprender a hacerla. Joder, acaban de publicar (hace tres días) la versión 1.0.10 y hay que actualizar cuanto antes, son tres problemas de seguridad de alto nivel o otros tantos menores. Ya lo dicen en la web en rojo y negrita: All existing Joomla! users MUST UPGRADE. Y hace poco que actualice a la 1.0.9. No hay problema ahora lo hago. Ante todo mucha calma. Pero primero voy a poner un poco de música.

Abro el Winamp, siempre fue mi reproductor favorito y es el que utilizo, versión 5.21, y se me abre una ventana. Hay que actualizar cuanto antes a la versión 5.24 por diversos problemas de seguridad. ¡Que remedio!, voy a descargar la nueva versión. Y empiezo a pensar en que se va a convertir mi ratito de ocio. Vaya desastre. Se enciende un led en el hemisferio cerebral derecho y pienso que esto merece una entrada en mi bitácora.

Bien, entré a escribir. Y nada más abrir, el Tablero, es decir, la página que se presenta al iniciar WordPress con ciertas noticias y los menús, pues veo algo que llama poderosamente mi atención: 2.0.4 and 2.1 Bug Hunt. ¡Oh No!, no puede ser…. la serie de números y puntos se clava en mi retina. Psicosis de las versiones y de los parches. Leo con un poco de atención y respiro aliviado. Se trata de invitar a la gente a instalar las próximas versiones de este maravilloso software y detectar cuantos errores sea posible antes de su publicación. Una bonita manera de celebrar el 4 de Julio, entre programadores americanos, digo yo. Respiro aliviado. Nada, sigo con mi ocio. Me voy a parchear.

Por cierto, gracias a los todos los programadores por todo el maravilloso software de código libre que utilizamos a diario. Sólo una pequeña sugerencia, ¿no habría que programar con la seguridad como elemento fundamental para evitar todos los problemas y pérdidas de tiempo que los parcheos acaban ocasionando? Supongo que no será tan fácil.